“Estamos atravesando un momento bastante difícil con el formato de ShowMatch. Buscaremos tratar de mejorar y seguir entreteniendo, pero si la gente quiere ver otra cosa... Bueno, haremos otra cosa”. Con estas palabras, Chato Prada, uno de los históricos productores del ciclo conducido por Marcelo Tinelli, dio cuenta este martes de la situación que enfrenta el programa tras el bajo rendimiento en materia de rating. En diálogo con Marcela Coronel, en su ciclo radial Mientras tanto, Prada atribuyó los magros resultados del ciclo a “muchos factores” y remarcó: “El canal no está atravesando un buen momento en general. Estamos viendo cosas del formato”. “No es la primera vez que nos ha pasado una cosa así. Los números no son los mismos de hace 10 años atrás”, reconoció. Y señaló que, en contraposición a lo que ocurre con eltrece, “Telefe está muy bien en cuanto a formatos y producciones, y tiene una novela [la ficción turca Doctor Milagro] que es una bomba”.
Un regreso complicado La semana pasada, el mismo Tinelli recurrió a las redes sociales para hacer su descargo por el bajo rating del programa. Sin alusiones directas, pero con una clara intención, el conductor y productor compartió en sus historias de Instagram un texto en el que daba cuenta de cómo debía “remar en dulce de leche” por el bajo piso de rating que le dejaba Telenoche, el programa que antecedía al suyo. Este lunes, con el regreso de Los 8 escalones del millón a la pantalla de eltrece, ShowMatch volvió a su histórico horario de las 22. Ese cambio, lejos de favorecer al programa en cuanto a la medición del rating, hizo que alcanzara su marca más baja: menos de tres puntos. Tras un año y medio de ausencia, Tinelli volvió a la televisión con varias novedades: un nuevo horario y la ausencia del “Bailando por un sueño”, el certamen de famosos que fue el caballito de batalla de ShowMatch por más de una década. El relativo éxito del Cantando 2020 y quizá también la batería de medidas protocolares que deben seguirse para evitar contagios en medio de la pandemia, hicieron que la producción buscara una alternativa al clásico reality. Así nació “La Academia”, un nuevo segmento en el que, además de bailar, los famosos deben cantar y actuar (dos disciplinas menos riesgosas al no exigir el contacto físico entre los miembros de los equipos). Con el correr de los programas, aquel innovador segmento fue mutando hasta parecerse cada vez más a su predecesor. El espacio en el que las parejas pueden alejarse un poco de la danza y presentar otras propuestas quedó específicamente relegado a la instancia del duelo. Así, recién en esta octava ronda -que es la que transitan los concursantes desde la semana pasada- los famosos son juzgados luego de cantar en vivo. Desde Telefe, la ficción turca Doctor milagro se reveló como el principal contrincante del programa de LaFlia para lograr el podio del rating y, a decir verdad, se transformó en una especie de verdugo imbatible. Frente a esta situación, se sucedieron volantazos de la producción para conseguir y fidelizar el favor de los televidentes. Los viernes tenían, en un principio, dos protagonistas excluyentes: los segmentos de humor, que funcionaban como una especie de autohomenaje a los sketchs y cámaras ocultas que brillaron hace décadas en VideoMatch; y “Politichef”, una parodia de MasterChef Celebrity, pero con imitadores que personificaban a algunas de las personalidades del mundo de la política local. Sin embargo, esa decisión duró poco y, tras dos semanas, “La Academia” se convirtió, también, en el principal -y único- atractivo del último día laboral de la semana. Entonces, la apelación a la emoción de los participantes y miembros del staff a través de apariciones sorpresivas de familiares y amigos en el estudio (en algunos casos, personas que no veían desde antes de que se declarara la pandemia) se convirtió en moneda corriente, como parte de una nueva estrategia que tampoco funcionó.
El escándalo por la imagen de Ana Frank El viernes pasado, mientras Sofía “Jujuy” Jiménez cumplía con el reto de cantar en vivo, se produjo un hecho que mantuvo al programa en el podio de las tendencias de Twitter. El tema elegido por la modelo fue “Yo no soy esa mujer”, de la mexicana Paulina Rubio, y el que podía haber sido un guiño más del programa hacia la igualdad de derechos, terminó tiñéndose de escándalo por la inclusión -en la pantalla gigante- de una fotografía de Ana Frank mientras sonaba la canción que repite “yo no soy esa mujer que no sale de casa”. Entre los muchos mensajes que tildaron de desubicada esa inclusión, se destacó -justamente- el del Centro Ana Frank, que conminó a los productores y al conductor a concurrir a sus instalaciones para conocer la historia de la adolescente alemana que debió vivir escondida con su familia en un sótano antes de ser trasladada a un campo de concentración, donde finalmente fue asesinada. En la charla con Coronel, Prada reveló que -junto a su compañero Federico Hoppe- cumplieron con ese pedido de la entidad, y luego hizo su descargo sobre aquella cuestionable inclusión. “No fue adrede que la producción se juntó y dijo ‘pongamos la imagen de Ana Frank’. Fue una desinteligencia. Intentó hacer algo Carla [Lanzi, la coach de Jiménez]; mostrar a mujeres fuertes de la historia, empoderadas. A veces la velocidad y el desconocimiento llevan a cometer estos errores”, explicó. Y agregó: “Gracias a esto, de alguna manera, podemos volver a aprender. Hoy fuimos al Museo en representación de Marcelo. Te juro por Dios que ese día yo no estaba, me había ido a Mar del Plata al festejo de mamá y papá, y esa imagen salió al aire. Pasó por un par de filtros y nadie se dio cuenta. Fue un grave error, de los cuales Fede y yo somos los responsables absolutos. Pudimos aprender más allá de lo que uno puede saber, por la edad y por haber leído. Seguimos aprendiendo”. Con respecto a la visita al centro, reveló: “Hablamos con Héctor Shalom, una persona con una calidad de persona, de protector. Tuvimos un diálogo maravilloso. Fuimos unas 10 o 12 personas representativas de todas las áreas [de LaFlia]. Fueron Carla y Sofía”. Y, sobre la ausencia de Tinelli, explicó: “Marcelo no pudo ir porque tenía otras cosas, no sé. No sé si sabía que era hoy. Somos los responsables de todo lo que pasa al aire, todas las imágenes que pasan atrás, Marcelo no va diciendo sí y no”.
Fuente: La Nación