En los últimos días salió a la luz un video terrible en el que se ve a Yao Cabrera, Lucas Castel, Gonza Fonseca y Fabri Lemus abusando de una chica que estaba inconsciente, tirada en una cama. El hecho generó enormes repercusiones, pero todavía parece que no se llega a entender la verdadera gravedad de lo que este material refleja. Luego de que se publicara y se hiciera viral, los youtubers implicados salieron a hacer sus correspondientes descargos para intentar explicar una situación que ya había quedado más clara que el agua con las imágenes que todos pudimos ver. Si todavía no las viste, o si querés refrescar la memoria, acá te lo dejamos. Lo cierto es que todo en este caso indigna, en especial porque no se está tomando real dimensión de la gravedad de lo que ocurrió. Por empezar, muchos fanáticos de estos ídolos juveniles los defienden a toda costa, sin poder ver el real problema que hay de fondo. Por otro lado, los protagonistas del hecho trataron de minimizar lo ocurrido y se justificaron diciendo que “estaban borrachos” o que eran mucho más jóvenes para entender lo que estaba pasando. Gonza Fonseca grabó un video en su canal de YouTube en el que intentó limpiar su imagen. Sin embargo, enredado en su discurso, terminó demostrando que ni él ni los demás estaban siendo conscientes de que realmente sí abusaron de esa chica. “Fueron 6 segundos que hice esa pajereada de mierda, ella se cagó de risa y yo después me caí inconsciente al lado. Después de eso se fueron todos y terminó ahí”, dijo en una parte de su descargo.
Por eso, es realmente importante que entendamos la gravedad de lo que refleja este video y que podamos ser conscientes de que esta sí se trató de una situación de abuso. – Haber tomado de más no es una excusa Uno tiene que hacerse cargo de sus propios actos y no puede vivir echándole la culpa a situaciones externas. Estar ebrio no justifica para nada este aberrante hecho y no minimiza las consecuencias de lo que cada uno haga. – Hay abuso cuando no hay consentimiento La chica estaba visiblemente inconsciente, por ende, nunca pudo haber dicho que sí a esta situación que se generó. Cuando alguien está en ese estado, es incapaz de decir que “sí” o que “no” y todos deberían respetar eso. La molestaron, intentaron sacarle la ropa y la manoseaban. Eso, acá y en la China, es abuso. – El abuso no es broma Aunque algunos intenten minimizarlos y aseguraron que “la estaban pasando bien y divirtiéndose en la fiesta”, lo que ocurrió se evidencia en el propio video: una mujer inconsciente rodeada de hombres que se burlaban de su estado y se aprovecharon de su vulnerabilidad. – El tiempo en el que ocurrió no justifica el hecho Luego de que salió a la luz el video, se excusaron diciendo que eso había sucedido hace dos años atrás. El punto de que haya ocurrido hace un tiempo atrás no quita que el abuso sucedió y que el hecho es igual de grave. – Estar en el lugar de la víctima es difícil Otro de los puntos que utilizaron los youtubers para justificar lo que pasó, fue que ella no los denunció y no se sintió abusada. Sin embargo, esto no significa que no haya ocurrido. Encontrarse en ese lugar es complicado: uno tiene vergüenza, se siente denigrado y vulnerable. De todas formas, hay que dejar de juzgar a la víctima, culpabilizarla y centrar la atención en lo que ella piensa o hace. Lo importante acá es entender que estos hombres abusaron de ella. – El que está mirando sin hacer nada también es culpable Muchos de los que estaban allí, intentaron lavarse las manos diciendo que ellos no participaron del acto, pero no actuar cuando se es testigo de un hecho así y reírse de lo que está pasando, también los hace cómplices. Que el fanatismo no te enceguezca. El abuso jamás podrá ser una broma, ni minimizado por un contexto de “diversión”. En un país como Argentina, en el que se está luchando hace tanto tiempo por la igualdad de género, este tipo de hechos y las repercusiones no hacen más que atrasar. Miremos esas cuentas de YouTube, pero también veamos esos otros videos que ellos prefieren callar.
Por Bárbara Simeoni y Sofi Dalesio