El hombre que pone a descubierto las infidelidades ‘virtuales’ de los jugadores

Tweet

Una cuenta en dos redes sociales -Twitter e Instagram- es el verdadero quebradero de cabeza para los futbolistas argentinos. Lo curioso de todo es que todo esto no es por el rendimiento que los futbolistas tienen sobre el campo de juego, sino por lo que hacen fuera de ello. Los dueños de la cuenta Anti-Botineras (@anti_boti), que tienen 146.000 seguidores se mantienen en el anonimato por el simple hecho de no exponerse a las posibles 'venganzas' de los perjudicados. 'Botineras' es el término que se utiliza para aquellas mujeres que son conquistadas por los jugadores de fútbol. La 'idea' de los creadores de esta manera de ventilar los deslices amorosos de los futbolistas comenzó en 2012 y 'explotó' exponencialmente en un caso en el que tuvo como protagonista el jugador Matías Defederico, actualmente en el Mumbai City de la Premier League india. A pesar de que casi todos los protagonistas pertenecen a los equipos de la Liga argentina, días pasados publicaron chats de Whatsapp en el que estaban involucrados Matías Kranevitter y Marco Rojo (Manchester United). El jugador del Sevilla mantenía diálogos subidos de tono con una mujer que no era su novia. Esta exposición pública de los jugadores podría haber sido el causante del reciente incidente que protagonizaron los 'barrabravas' de Boca Juniors con sus jugadores al que pedían más profesionalidad y que dejen de estar tan 'activos' en las redes sociales. Betancur, Cubas y Centurión fueron los futbolistas involucrados. El sitio MARCA.com se comunicó vía mail con el responsable de la cuenta en que resalta que existen para que se conozca lo mal que actúan los personajes que tienen un cierto privilegio de ser conocidos y famoso por su actividad. "La finalidad que tenemos es la de 'escrachar' (que se conozca la verdad) a las 'botineras' y a los jugadores. Nuestra veracidad es 100% real sobre lo que publicamos porque tenemos seguidores y fuentes de mucha confianza que nos hacen confiar en que los diálogos son verdaderos". Sobre el posible descubrimiento de la identidad de los que manejan la cuenta, explica: "Algunas personas del ambiente nos conocen y por ahora no recibimos ningún tipo de amenazas". Sobre la supuesta morbosidad de Kranevitter con una mujer que no era su novia, el informante aclara que las capturas de los mensajes se lo hicieron llegar por mail. "Todo lo que contamos es real. No nos inventamos nada ni tampoco buscamos casos inventados". El nombre de la mujer a la que intentó conquistar Kranevitter y responde al nombre de Ana Victoria Rucci. Ella misma confesó que fue quien comenzó con las charlas y aclaró que decidió borrar las conversaciones porque "Kranevitter era demasiado pesado. Hablábamos por Instagram. No me acuerdo porque borré toda la conversación, sólo me quedaron las capturas que están en todos lados y una más que no se publicó. Yo me acuerdo que le empecé a hablar normal y después nos fuimos yendo un poco de tema. Además, él era demasiado pesado", contó la mujer a un medio argentino, en el que dio la cara y confirmó que recibió amenazas después de se publicaran los chats. Esta cuenta no sólo publica los chats privados, sino que la veracidad es real porque también muestran las fotografías, en muchos casos, de los jugadores desnudos que estos envían a las mujeres que buscan ligar.