Bailando 2011:»Problemas de peso»

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Que Larissa está pasada de peso. Que Érica Mitdank no come y que el programa de El Trece usa a los obesos, son temas que circulan a diario por la tele, con un tratamiento que no es el mejor. La mala alimentación y el estereotipo de la figura perfecta son dos circunstancias íntimamente ligadas entre sí y también con la pantalla, y a búsqueda del cuerpo ideal y los caminos equivocados que se usan para llegar a este modelo pasaron a formar parte de la agenda temática de la mayoría de los programas. También las presiones que reciben las figuras son señaladas por un resto crítico que no concibe este tipo de discriminación en TV. Pero se puede empezar a analizar el tema haciendo un relato cronológico que encuentra como punto de partida el desmayo de Rocío Guirao Díaz y el señalamiento de algunas falencias en su dieta. Ella lo negó, pero la historia continuó con Érica Mitdank, quien en la pista de Bailando 2001 declaró tener trastornos alimenticios por falta de apetito y no acudir a ningún especialista. Dicha situación promovió distintas “mesas de debate”, el análisis de la confesión y la crítica a la producción de Tinelli, que no les hace chequeos médicos a los participantes. En un estrado contrario, Graciela Alfano, lejos de levantar la bandera de “los cuerpos sanos”, asume la función de “balanza humana” y se encarga de avisarles a los concursantes de Bailando que han subido de peso y les sugiere bajar. Se suma a ella Claudia Ciardone tildando de gorda a Ritó, y otra de las mediáticas haciendo lo propio con Larissa Riquelme. Fuera de esta mención, Cuestión de peso, un programa que nació para ayudar a los obesos a cambiar su vida, hoy se ha convertido en un verdadero show, ampliamente criticado por quienes sienten que hay una explotación del morbo. La cuestión de la delgadez extrema, de los parámetros para pertenecer o quedar afuera, “de los gordos que deben adelgazar” y “los extremadamente flacos que están divinos o necesitan tratarse” es tema de discusión. Mientras tanto, no se miden las palabras, se hacen diagnósticos equivocados y hay críticos y defensores de los modelos y programas que promueven estas definiciones. Fuente:television.com.ar