Cuando las cámaras no miran, en toda ceremonia siempre hay momentos tensos, emotivos o graciosos que quedan en el recuerdo. lanacion.com estuvo dentro de la 41° entrega de los premios Martín Fierro para contarte las mejores anécdotas de los premios a la radio y la televisión local.
Las mesas. Como todos los años, la distribución de las mesas generan comentarios: quién está más lejos, quién se sienta con quién... Este año, las primeras ubicaciones cerca del escenario estuvieron ocupadas por las grandes estrellas de la televisión. Separados por un pasillo, de un lado estaban la mesa de Marcelo Tinelli (que ocupaba la mesa n° 1, tal vez como augurio de su premio de Platino) y la de Mirtha Legrand. Del otro lado, en la segunda mesa estaba Susana Giménez con su entorno (entre ellos, su hija y su amiga Teté Coustarout) y Adrián Suar, con la cúpula de El Trece, organizador del evento. La peculiaridad: en esa mesa había una pequeña pantalla para que el gerente de programación del canal siguiera la transmisión, y un I-Pad, donde Pablo Codevilla -su colaborador- seguía minuto a minuto el rating.
La sorpresa. Cuando ya habían pasado dos horas de ceremonia, entró al salón Moria Casán y sorprendió a todos. Después de pasar a saludar a quienes estaban en las primeras mesas, los organizadores del evento intentaron ubicarla en la mesa de Guillermo Blanc y Viviana Canosa, aunque la diva prefirió sentarse en una mesa de Ideas del Sur (donde estaban Mariano Iúdica, Sofía Zámolo, Peter Alfonso, entre otros). Es entendible, ya que fue a la ceremonia para felicitar a Tinelli por su Martín Fierro de Platino.
Además, la distribución de las mesas en el Salón Pacífico del hotel Hilton separó a dos parejas. Griselda Sicialini se sentó, claro, en la mesa de Para vestir Santos, aunque muy cerca de la mesa de su pareja, Suar. Por su parte, el nieto de Mirtha, Nacho Viale, estuvo toda la noche inseparable de su abuela, mientras que su novia, Eugenia Suárez, estuvo con sus compañeros de Casi ángeles. Sin embargo, en un momento de la noche, la joven se sentó en su mesa.
El juanagate, presente. Uno de los primeros ganadores de la noche, Beto Casella, con su programa Bendita (en la cuestionada terna de programa periodístico), generó un momento tenso en el salón. En medio de sus palabras, decidió mandarle un mensaje a Mirtha Legrand, claramente en alusión al complicado momento mediático en el que está inmersa su familia por el romance de su nieta, Juana Viale, con Martín Lousteau. "¡Que pase este momento, Mirtha!", dijo y generó un extraño clima. Enseguida, una cámara de El Trece se acercó a la conductora de los almuerzos para que mostrara que salió ilesa del momento. Además, Viale, que estuvo nominada por su labor en Malparida, también fue recordada y elogiada en los discursos de Adrián Suar (cuando recibió el premio a mejor telenovela por ese culebrón) y Raúl Taibo (ganador por su trabajo en la misma novela).
El centro de atención. Cuando Brenda Gandini y Gonzalo Heredia llegaron al salón poco después de que comenzara la ceremonia, todos miraron la crecida panza de la actriz, próxima a ser madre. Así, la mayoría de sus colegas aprovechó los cortes para ir a felicitar a la pareja que nació en Malparida. El dato de color: mientras ellos no se escatimaban besos y mimos, a pocas mesas de distancia observaba Cecilia Roth, ex pareja de Heredia, que se sentó con sus nuevos compañeros de El elegido.
Ironías de Susana. Después de una equivocación con el tape de presentación a la mejor labor humorística en televisión, el premio fue finalmente para Antonio Gasalla. Ante su ausencia, Susana Giménez recibió el galardón y aprovechó para jugar una nueva carta para convocar al humorista a la nueva temporada de su ciclo. "Este premio es para Antonio que no vino y este año no está conmigo en el programa. ¡Antonio si no venís, no te doy el premio!", exclamó la conductora y despertó risas. A los pocos minutos, ante otro notorio faltazo en la entrega, Adrián Suar recibió el premio de Ricardo Darín por participación especial, e hizo una advertencia similar al actor para que participe de alguno de sus actuales productos.
Emoción. Algunos nombres causaron emoción durante toda la ceremonia apenas eran mencionados. Fueron dos principalmente los que despertaron aplausos: Juan Alberto Badía y Romina Yan. El conductor, que estuvo nominado por conducción en televisión, fue invocado por sus colegas, quienes le mandaron fuerzas en su recuperación de un cáncer. Romina Yan, por su parte, estuvo presente en varios momentos y en todos, en mayor o menor medida, movía hacia las lágrimas a los invitados. El primer reconocimiento estuvo en manos de los chicos de Casi ángeles, cuando ganaron su galardón, y también estuvo presente en el discurso de Marcelo Tinelli. Además, de ser uno de los personajes reconocidos en el In memoriam, el momento más conmovedor fue sin duda cuando premiaron a su padre, Gustavo Yankelevich, quien comenzó quebrado su discurso de agradecimiento y generó la empatía de los presentes.
Off-side. Cuando Yankelevich decidió cortar su discurso de agradecimiento por no poder contener su emoción, lo acompañó todo el auditorio de pie, entre aplausos. Mientras el productor se iba, y todos seguían conmovidos, Mike Amigorena tomó la palabra y, en un tono de congoja, para ir a tono con el clima del salón, comenzó a hacer la venta para que el público mandara mensajes de texto para votar para el Martín Fierro de Platino. Los chiflidos de los asistentes lograron que el conductor frenara el anuncio y se fueron a una tanda.
Conductora sorpresa. Por segundo año consecutivo, el premio a la mejor conducción femenina fue a manos de una de las nominadas de la nueva generación. En una categoría con nada menos que seis candidatos (que despertó críticas por Susana Giménez), el Martín Fierro se lo llevó Mariana Fabbiani (por RSM ). A diferencia del año pasado, en la que su cara de sorpresa fue captada por las cámaras, la diva aplaudió la elección de Aptra, al igual que Mirtha, que si bien se mostró extrañada, dio su aprobación ante los presentes. Recordemos que, por su parte, Susana se llevó el premio como mejor programa de entretenimientos, pero Legrand se fue con las manos vacías.
Problema de salud. Mónica Antonópulos llegó al Hilton muy divertida junto a su compañera de El elegido María Carámbula. Sin embargo, la actriz que interpreta a Greta debió dejar la ceremonia porque le bajó la presión.
La tecnología fue la estrella. Los celulares, las cámaras de fotos y Twitter fueron la gran distracción de los famosos, sobre todo con el paso de las horas. Ya sea para sacar fotos, hablar por teléfono o chatear con sus celulares inteligentes, la tecnología llevaba un poco de aire fresco a los artistas en el Hilton. Así fue como, a su vez, muchos expresaron sus pensamientos a sus seguidores. Un ejemplo es el de Griselda Sicialiani, quien, apenas perdió como actriz de unitario frente a su compañera de elenco, Gabriela Toscano, escribió: "¡Estoy feliz por Gaby! ¡Estuve aguantando el llanto por la emoción de lo que dijo la Toscano! ¡Muy merecido! ¡Aprendí mucho de ella!"
Peter, furor en Twitter. La foto más vista de la noche, con más de mil visitas, fue la de Pedro Alfonso, el productor de Ideas del Sur que, además, ahora baila por un sueño. El joven, que estuvo toda la ceremonia haciendo notas para Este es el show con Mariano Iúdica, subió además a su cuentauna foto con el Martín Fierro de su jefe. ¿Le llegará el turno a él?
Todos los looks de los Martín Fierro
En la alfombra roja de la ceremonia se vio de todo; entre las más destacadas estuvieron Natalia Oreiro, Leticia Brédice, Mariana Fabbiani y Susana Giménez.
Lo mejor y lo peor de los Martín Fierro 2011 LO MEJOR Merecidos Martín Fierro Como todos los años siempre hay entre los premios entregados algunos que son indiscutibles y anoche no fue la excepción. Los Martín Fierro a Selva Alemán, a Rodrigo de la Serna, a Antonio Gasalla, al unitario Para vestir santos, entre otros, sin lugar a dudas se encuentran en esa categoría. Pero, por supuesto, la línea divisoria entre los justo y lo injusto es muy finita y no todos los flamante ganadores y perdedores merecen esa condición. La noche tuve tres grandes momentos emotivos: los homenajes a Carlitos Balá, a Gustavo Yankelevich y a su familia sinónimo de televisión y el In memorian. Aplausos de pie, lágrimas -por el recuerdo de la fallecida Romina Yan- y emoción a flor de piel transmitieron estas etapas, que es donde estuvo el corazón de la ceremonia. DE YAPA El principio de la transmisión de la ceremonia parecía augurar una buena noche, divertida y relajada. Seguramente, este clip le sacó una sonrisa a más de uno... LO PEOR La conducción No parecía una mala idea per se probar la dupla Mike Amigorena y Natalia Oreiro en la conducción de Martín Fierro y ver si ellos lograban un poco de frescura y hacer la velada más agradable y entretenida. Pero el resultado de anoche muy lejos está de la promesa. Amigorena leyó cada frase que tuvo que decir -casi sin levantar la vista del papel- y acotó en los momentos en los que no debía y Oreiro tampoco logró lucirse sino más bien todo lo contrario. Y pese a las palabras finales de Adrián Suar alabando la tarea, la pareja de actores reprobó la prueba. Que pase el que sigue... La duración de la ceremonia Larga noche, muy larga para una entrega de premios y para poder seguirla entusiasmado. La transmisión de la alfombra roja empezó a las 19.30 y pasadas las 21 terminó. Después le llegó el turno a la ceremonia de premios. La entrega dio su puntapié inicial alrededor de las 21.20 y Amigorena y Oreiro se despidieron de los televidentes a las 1.40 de la madrugada. ¿Cuánta gente se habrá enterado en la madrugada que Para vestir santos se llevó el Oro? Poca, muy poca...
¿Periodístico? Es un clásico de los Martín Fierro que todos los años varios famosos se quejen de estar en alguna categoría que no les corresponde o directamente criticar no ser incluidos... Un rubro muy criticado este año fue el periodístico y el ganador no hizo más que elevar la crítica a la décima potencia. Mejor programa periodístico de 2010, según Aptra... ¡Bendita! ¿Eh? ¿Ustedes también estaban viendo otro canal? YAPA Una polémica que no fue y el Juanagate en los Fierro. Juana Viale no estuvo en la entrega de premios por obvias razones, pero todo lo que pasó en torno a ella se hizo presente en cada frase de aliento que los famosos le dieron a Mirtha Legrand y cada vez que la novela Malparida se llevó un galardón y se llevó varios. Por otra parte, la nieta de la diva figuraba como nominada en la categoría mejor actriz de telenovela, que por su bien -y el de varios- lo ganó Selva Alemán. Fuente y gentileza:.lanacion.com.ar