El eclipse total de Sol que recorrerá el Pacífico Sur llegará a Argentina a partir de las 17:00 hora local, principalmente sobre la cordillera de los Andes, desde donde alcanzará la Patagonia Argentina antes de desaparecer.
En el resto del territorio argentino se verá un eclipse parcial, si el clima lo permitiese, aunque hay pronósticos de nubes y lloviznas en buena parte del recorrido del eclipse sobre el continente sudamericano, debido al ingreso de una masa de aire polar.
En la historia de las civilizaciones, los eclipses se encuentran entre los eventos naturales más motivadores del desarrollo de la ciencia. Pocas culturas intentaron comprender el fenómeno desde un punto de vista físico, con relativo y variado éxito, habiendo quedado registros desde hace 3000 años.
En la antigüedad los eclipses provocaron asombro y temor, llegando incluso a decidir el comienzo de guerras y el curso de batallas. Hoy 11 de junio de 2010, causa más conmoción, la final de la Copa del Mundo entre Holanda y España, si acertó el Pulpo Paul o no... Evidentemente los tiempos cambian y las inquietudes también.
Desde hace año y años, la mecánica de los eclipses es perfectamente conocida logrando que hoy pueden predecirse con toda la anticipación y precisión.
Es un fenómeno es bastante frecuente: ocurren como mínimo cuatro al año, dos de Sol y dos de Luna. En efecto, un eclipse de Luna, por ejemplo, es siempre acompañado por un eclipse de Sol, separados catorce días entre sí aproximadamente. A su vez, a los seis meses, ocurre un nuevo par de eclipses de Sol y de Luna.
Un eclipse de Luna, como el que se hubiera observado en nuestra región el pasado 26 de junio si no hubiera estado nublado, es un fenómeno semiglobal.
En efecto, todo el hemisferio nocturno (de noche) puede ver el fenómeno durante su transcurso.
Los eclipses totales de Sol, sin embargo, no son tan fáciles de presenciar. La franja sobre la superficie terrestre desde la cual puede observarse un eclipse total de Sol suele medir no más de 200 km de ancho por algunos miles de kilómetros de largo en el mejor de los casos. Por ello, a pesar de que ocurren al menos dos por año, es bastante poco frecuente tener la oportunidad de presenciarlo desde nuestras localidades.
En Calafate, región de la Patagonia Argentina, se reunirán científicos, astrónomos internacionales y público en general en la llamada Tercera Cumbre Internacional de Eclipse Solar (Intersoles – 3), cuyo objetivo es informar sobre el fenómeno.
Si bien el evento recorrerá todo el territorio argentino, en las regiones más meridionales solo podrá verse un eclipse parcial. Por ejemplo, en Buenos Aires (capital de la República Argentina), ocurrirá a partir de las 18:59 hora local pero es muy probable que sea visualizado con dificultad. La cobertura del Sol por parte de la Luna alcanzará un 40%, y el ocaso se producirá con el Sol parcialmente eclipsado, como en el caso de Uruguay.
Los científicos recomiendan a quienes vayan a presenciar el espectáculo a que se protejan los ojos, debido a que la exposición de la vista a los rayos del Sol, (especialmente la radiación UV que emana de él) puede producir lesiones en la vista de diversa entidad, pudiendo llegar en casos extremos a ceguera.
El pico máximo del eclipse, es decir, cuando la luna cubra el 100% del disco solar, se producirá a las 17:50, hora local. Será ya el atardecer, por lo que es necesario buscar un punto elevado para una mejor observación. Los expertos lo explican así: “La banda de totalidad llega a El Calafate en la tarde cuando el sol y la luna estarán a un grado arriba del horizonte. El mejor punto donde se podrá observar el eclipse es a unos 60 minutos de la ciudad, en el área de los cerros Huyliche y Frías. El primer contacto del sol y la luna será a las 16:44 (hora local) y la totalidad será a partir de las 17:48, destellando a 1° de altura sobre los Andes y reflejándose sobre el Lago Argentino y la planicie patagónica argentina”.
El eclipse total de Sol que recorrerá el Pacífico Sur llegará a Argentina a partir de las 17:00 hora local, principalmente sobre la cordillera de los Andes, desde donde alcanzará la Patagonia Argentina antes de desaparecer.
En el resto del territorio argentino se verá un eclipse parcial, si el clima lo permitiese, aunque hay pronósticos de nubes y lloviznas en buena parte del recorrido del eclipse sobre el continente sudamericano, debido al ingreso de una masa de aire polar.
En la historia de las civilizaciones, los eclipses se encuentran entre los eventos naturales más motivadores del desarrollo de la ciencia. Pocas culturas intentaron comprender el fenómeno desde un punto de vista físico, con relativo y variado éxito, habiendo quedado registros desde hace 3000 años.
En la antigüedad los eclipses provocaron asombro y temor, llegando incluso a decidir el comienzo de guerras y el curso de batallas. Hoy 11 de junio de 2010, causa más conmoción, la final de la Copa del Mundo entre Holanda y España, si acertó el Pulpo Paul o no... Evidentemente los tiempos cambian y las inquietudes también.
Desde hace año y años, la mecánica de los eclipses es perfectamente conocida logrando que hoy pueden predecirse con toda la anticipación y precisión.
Es un fenómeno es bastante frecuente: ocurren como mínimo cuatro al año, dos de Sol y dos de Luna. En efecto, un eclipse de Luna, por ejemplo, es siempre acompañado por un eclipse de Sol, separados catorce días entre sí aproximadamente. A su vez, a los seis meses, ocurre un nuevo par de eclipses de Sol y de Luna.
Un eclipse de Luna, como el que se hubiera observado en nuestra región el pasado 26 de junio si no hubiera estado nublado, es un fenómeno semiglobal.
En efecto, todo el hemisferio nocturno (de noche) puede ver el fenómeno durante su transcurso.
Los eclipses totales de Sol, sin embargo, no son tan fáciles de presenciar. La franja sobre la superficie terrestre desde la cual puede observarse un eclipse total de Sol suele medir no más de 200 km de ancho por algunos miles de kilómetros de largo en el mejor de los casos. Por ello, a pesar de que ocurren al menos dos por año, es bastante poco frecuente tener la oportunidad de presenciarlo desde nuestras localidades.
En Calafate, región de la Patagonia Argentina, se reunirán científicos, astrónomos internacionales y público en general en la llamada Tercera Cumbre Internacional de Eclipse Solar (Intersoles – 3), cuyo objetivo es informar sobre el fenómeno.
Si bien el evento recorrerá todo el territorio argentino, en las regiones más meridionales solo podrá verse un eclipse parcial. Por ejemplo, en Buenos Aires (capital de la República Argentina), ocurrirá a partir de las 18:59 hora local pero es muy probable que sea visualizado con dificultad. La cobertura del Sol por parte de la Luna alcanzará un 40%, y el ocaso se producirá con el Sol parcialmente eclipsado, como en el caso de Uruguay.
Los científicos recomiendan a quienes vayan a presenciar el espectáculo a que se protejan los ojos, debido a que la exposición de la vista a los rayos del Sol, (especialmente la radiación UV que emana de él) puede producir lesiones en la vista de diversa entidad, pudiendo llegar en casos extremos a ceguera.
El pico máximo del eclipse, es decir, cuando la luna cubra el 100% del disco solar, se producirá a las 17:50, hora local. Será ya el atardecer, por lo que es necesario buscar un punto elevado para una mejor observación. Los expertos lo explican así: “La banda de totalidad llega a El Calafate en la tarde cuando el sol y la luna estarán a un grado arriba del horizonte. El mejor punto donde se podrá observar el eclipse es a unos 60 minutos de la ciudad, en el área de los cerros Huyliche y Frías. El primer contacto del sol y la luna será a las 16:44 (hora local) y la totalidad será a partir de las 17:48, destellando a 1° de altura sobre los Andes y reflejándose sobre el Lago Argentino y la planicie patagónica argentina”.
